Infraestructuras del futuro: diseño inclusivo y sostenible como ventaja competitiva

Durante años hemos pensado en la infraestructura como algo “de fondo”: edificios, estadios, productos físicos, ciudades… necesarias, pero poco sexys. Sin embargo, las señales que llegan desde el mundo de la innovación apuntan a un cambio profundo: la infraestructura se está convirtiendo en una ventaja competitiva visible, un espacio donde las marcas demuestran de verdad su compromiso con la inclusión y la sostenibilidad.

Tres casos recientes lo ilustran muy bien:

• Un accesorio de Apple nacido de la accesibilidad y convertido en objeto de deseo.
• Una ciudad que rediseña la energía de sus festivales para eliminar generadores diésel.
• Una liga de fútbol que reimagina estadios pensando por primera vez en las necesidades de las mujeres.

En paralelo, premios globales como The Earthshot Prize 2025 están señalando soluciones que rediseñan bosques, océanos, ciudades o sistemas de moda desde la raíz.

La pregunta para cualquier directivo es clara:

¿Hasta qué punto nuestras infraestructuras –físicas y digitales– reflejan los valores de inclusión y sostenibilidad que decimos defender?

1. De producto a infraestructura experiencial

Una de las grandes ideas que está empujando TrendWatching es OMNIBILITY: la accesibilidad como nueva frontera de justicia social y como motor de innovación transversal. No se trata solo de “adaptar” productos para minorías, sino de diseñar desde el inicio para todas las personas y convertir esas soluciones en propuestas mainstream.

Esto conecta con un cambio de paradigma:

• Antes: la infraestructura era un coste (un estadio, una tienda, un campus, un festival).
• Ahora: la infraestructura es una experiencia y una declaración de marca:
  • Cómo se accede.
  • Quién se siente cómodo y seguro.
  • Qué impacto ambiental genera.
  • Qué historia cuenta al empleado, al cliente y al regulador.

Lo interesante es que las innovaciones más potentes no necesariamente son las más futuristas: muchas consisten en replantear lo básico (agarrar un móvil, entrar a un baño, enchufar un escenario) con otra mirada.

2. Apple y el “pequeño” accesorio que redefine la accesibilidad

Hace unos días, Apple lanzó un nuevo grip MagSafe para iPhone, diseñado con criterios de accesibilidad: un accesorio que facilita que personas con ciertas limitaciones motrices puedan sujetar y usar el móvil con más estabilidad… y que, además, se ha convertido en un objeto de deseo para el público general. El producto se agotó rápidamente pese a su precio, en torno a los 70 dólares.

Qué hay detrás de este caso

1. Accesibilidad que no parece “especial”
   No es un producto “segregado” para personas con discapacidad; es un accesorio de diseño cuidado, integrado en el ecosistema Apple y deseable para cualquiera.
   • Mensaje implícito: “no te hacemos un favor; estamos haciendo mejor diseño para todos”.
2. Pequeña infraestructura, gran impacto
   Un grip puede parecer un detalle menor, pero en la práctica es una microinfraestructura de interacción: condiciona cómo coges el dispositivo, cómo lo colocas en la mesa, cómo grabas contenido, cómo lo usas durante largos periodos.
3. Negocio y propósito se alinean
   • Producto premium, margen alto, demanda fuerte.
   • Refuerzo del posicionamiento de Apple en diseño, inclusión y experiencia de usuario.

Lecciones para cualquier marca

• Revisa todos tus “puntos de contacto físicos”: pomos, mostradores, butacas, dispositivos, packaging, señalética, formularios…
• Pregunta:
  • ¿Para quién son incómodos o inaccesibles hoy?
  • ¿Qué ocurriría si los rediseñases empezando por esos colectivos?

Muchas innovaciones infraestructurales ganadoras empiezan donde nadie miraba: en los detalles.

3. Bristol: festivales y rodajes alimentados por energía limpia

Otro ejemplo de cómo la infraestructura se convierte en ventaja competitiva llega desde el sector cultural y de eventos.

La ciudad de Bristol (Reino Unido) pondrá en marcha a partir de 2026 un “clean power hub” móvil: una infraestructura que almacena energía 100 % renovable procedente de la red para alimentar festivales, conciertos y rodajes, reduciendo drásticamente el uso de generadores diésel.

Qué hace diferente a este proyecto

1. Una solución de ciudad para un problema de sector
   • El proyecto no es de un festival concreto, sino del ayuntamiento y la autoridad metropolitana.
   • Permite que más de 20 eventos (festivales, grandes conciertos, producciones audiovisuales) se conecten a un mismo sistema limpio, con garantías de suministro y métricas de impacto.
2. Infraestructura móvil, impacto permanente
   • La energía se almacena en baterías que pueden desplazarse a distintos emplazamientos a lo largo de la temporada.
   • La ciudad se posiciona como hub de cultura sostenible, atrayendo a artistas y proyectos que ya exigen condiciones ambientales específicas.
3. Experiencia y reputación
   • Para el público, es una historia que se puede contar: “Este festival está alimentado con energía limpia”.
   • Para los patrocinadores, un activo de comunicación clave en términos de ESG.

¿Por qué debería importarle a tu empresa?

Aunque no organices festivales, probablemente dependes de eventos, logística, flotas, centros de datos o edificios intensivos en energía. Este caso enseña que:

• La infraestructura energética puede ser un factor de elección para clientes, talento y partners.
• Las soluciones de ciudad, sector o “plataforma” tienen más impacto que los esfuerzos aislados de un solo actor.

4. Estadios diseñados pensando (por fin) en las mujeres

En el mundo del deporte, Inglaterra acaba de marcar un antes y un después. La Women’s Super League (WSL) ha publicado la primera guía integral para diseñar y rediseñar estadios en torno a las necesidades de las mujeres, tanto jugadoras como aficionadas.

La guía aborda elementos como:

• Vestuarios y zonas de preparación adaptados a ciclos hormonales, privacidad y seguridad.
• Aseos suficientes y bien distribuidos (un clásico problema en estadios, festivales y espacios públicos).
• Iluminación y recorridos que minimicen zonas oscuras o inseguras.
• Señalética, accesos, restauración y merchandising pensados para una base de fans más diversa.

Por qué esto es más que “un tema de fútbol”

1. Cambia la pregunta de diseño
   • Pasamos de “¿cuánta gente cabe?” a “¿quién puede disfrutar de forma segura y cómoda?”
   • La unidad de medida ya no es solo el aforo, sino la calidad de la experiencia para distintos perfiles.
2. El impacto va más allá del deporte
   • Estas guías pueden inspirar centros comerciales, recintos feriales, campus universitarios, hospitales, aeropuertos…
   • Cualquier lugar donde la infraestructura se diseñó históricamente con un usuario “estándar” (varón, sin discapacidad, sin menores a cargo).
3. La inclusión se vuelve tangible
   • No hablamos solo de campañas de comunicación, sino de baños, accesos, butacas, rutas de evacuación, sistemas de transporte asociados.

Preguntas para tu organización

• ¿Para quién fue diseñado originalmente tu edificio, tu campus, tu aplicación, tu producto?
• ¿Qué colectivos están “tolerando” la experiencia, en lugar de disfrutarla de verdad (mujeres, personas mayores, familias, personas con discapacidad, personas neurodivergentes)?
• ¿Qué cambios infraestructurales (no solo cosméticos) haría falta introducir?

5. Earthshot Prize 2025: cuando la infraestructura salva el planeta (y el negocio)

El Earthshot Prize 2025, impulsado por la Royal Foundation del Príncipe Guillermo, ha premiado cinco soluciones que, en el fondo, son nuevas formas de infraestructura ambiental y social:

• re.green (Brasil): restauración de bosques a gran escala apoyada en IA, redibujando la “infraestructura natural” de regiones enteras.
• Ciudad de Bogotá (Colombia): políticas de transporte y calidad del aire que rediseñan la infraestructura urbana para millones de personas.
• High Seas Treaty (Global): un tratado que crea una infraestructura legal para proteger áreas marinas fuera de jurisdicciones nacionales.
• Lagos Fashion Week (Nigeria): una plataforma que reconfigura la cadena de valor de la moda hacia modelos circulares y de bajo residuo.
• Friendship (Bangladés): soluciones para comunidades vulnerables al cambio climático (salud, educación, energía) en zonas remotas y frágiles.

El mensaje de fondo es potente:

Las infraestructuras del futuro no son solo carreteras, puertos o redes eléctricas; son bosques restaurados, tratados internacionales, sistemas de movilidad, plataformas circulares y soluciones climáticas locales.

Para las empresas, esto significa que los proyectos de infraestructura sostenible no son filantropía, sino:

• Nuevos mercados (Climate Tech, movilidad, infra urbana, circularidad).
• Diferenciales de marca.
• Vías de colaboración público-privada.

6. De la inspiración a la acción: 7 palancas para directivos

Si queremos que la inclusión y la sostenibilidad sean ventaja competitiva real y no solo discurso, hay que bajar estas ideas a decisiones concretas. Te propongo 7 palancas:

1. Auditoría de infraestructura inclusiva

• Haz un inventario de tus activos físicos y digitales clave: oficinas, tiendas, plantas, webs, apps, eventos, plataformas.
• Evalúalos desde la perspectiva de distintos colectivos: mujeres, personas mayores, personas con discapacidad visible e invisible, familias, personas LGTBIQ+, etc.
• Identifica “puntos de fricción” obvios (accesos, baños, esperas, señalética, procesos on-boarding, idiomas).

2. Rediseñar empezando por los extremos

• Toma nota de Apple: diseña primero para quienes lo tienen más difícil… y luego lleva ese diseño a toda la base de clientes.
• Involucra a esos colectivos en sesiones de co-creación, pilotos y pruebas de usuario.

3. Hacer visible la energía

• Siguiendo el ejemplo de Bristol, pregúntate:
  • ¿De dónde viene la energía de tus eventos, centros o data centers?
  • ¿Puedes hacerla más limpia y contarlo de forma transparente al cliente?

4. Aplicar el enfoque “blueprint” de la WSL

• No te quedes en mejoras aisladas; construye un documento marco que marque estándares para todos tus espacios (o todas tus sedes/tiendas).
• Incluye indicadores claros: tiempos de acceso, ratio de baños por género, encuestas de seguridad percibida, etc.

5. Conectar infraestructura y relato de marca

• Tus infraestructuras son uno de los pocos assets difíciles de copiar.
• Incorpora estos proyectos (accesibilidad, energía limpia, rediseño de espacios) en tu narrativa de marca, en ESG y en employer branding.

6. Buscar aliados

• Muchos de estos cambios requieren colaboración público-privada: ciudades, utilities, organizaciones sectoriales.
• Mira el modelo de Earthshot: grandes retos que se abordan con consorcios, no solo con empresas aisladas.

7. Medir más allá del ROI inmediato

• Integra indicadores de:
  • Inclusión (quién accede, quién se queda fuera, quién repite).
  • Impacto ambiental (emisiones, residuos, agua, energía).
  • Experiencia (NPS, seguridad percibida, bienestar).

7. Por dónde empezar mañana

Si tuvieses que activar algo en las próximas semanas, una hoja de ruta realista podría ser:

1. Elegir un “escenario piloto”
   • Una tienda, un edificio corporativo, un evento clave, una app concreta.
2. Aplicar el enfoque inclusivo + sostenible
   • Rediseñar 3–5 elementos de infraestructura (acceso, energía, baños, señalética, interacción digital).
   • Medir antes y después.
3. Contarlo bien (sin greenwashing)
   • Explicar qué has cambiado, por qué y cómo vas a seguir mejorando.
   • Compartir aprendizajes, no solo éxitos.
4. Escalar lo que funciona
   • Convertir el piloto en estándar y extenderlo a otros activos.

Las infraestructuras del futuro no son solo más inteligentes y eficientes: son más humanas y más responsables. En un entorno donde productos y servicios se copian con facilidad, cómo diseñas tus espacios, tus sistemas y tus reglas puede convertirse en tu ventaja competitiva más difícil de imitar.