La IA se utiliza para ofrecer terapia de salud mental clínicamente probada

Ha habido un creciente reconocimiento de la importancia de los problemas de salud mental en el desarrollo global en los últimos años. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la depresión es una de las principales causas de discapacidad, mientras que el suicidio es la segunda causa de muerte entre los jóvenes de 15 a 29 años. Sin embargo, al mismo tiempo, hay una falta de opciones de tratamiento disponibles, especialmente a un precio asequible. La start-up de Healthtech Clare&me tiene la misión de hacer que la atención de la salud mental sea más accesible.

Si bien se ha demostrado que la terapia de conversación es efectiva para tratar a muchos de los que sufren de ansiedad y depresión, la demanda de terapeutas capacitados supera con creces la oferta.

Clare&me ofrece una opción asequible mediante el uso de una plataforma de inteligencia artificial para entablar conversaciones verbales con los usuarios. La plataforma está diseñada para «sentir a un humano» y ofrecer enfoques clínicamente probados para la terapia conductual, ofreciendo apoyo psicológico asequible independientemente de la ubicación y el tiempo.

La cofundadora Celina Messner, describe los desafíos en la prestación de tratamiento de salud mental, diciendo: «Mantener y promover la salud mental de las personas es uno de los mayores desafíos actuales que enfrenta la sociedad. Queremos contribuir de manera proactiva a cerrar la brecha entre la necesidad y el suministro de apoyo a la salud mental, lo que solo podemos lograr juntos, con las partes interesadas en el sistema de salud, los políticos, las empresas y los desarrolladores de tecnología innovadora».

La creciente conciencia de los problemas de salud mental ha llevado a una serie de innovaciones en este espacio.

A nivel mundial, la OMS estima que alrededor de 264 millones de personas se ven afectadas por la depresión, mientras que alrededor de 374 millones de personas se ven afectadas por trastornos de ansiedad en cualquier momento. La pandemia de COVID-19 no solo ha acelerado la velocidad a la que las personas desarrollan problemas de salud mental como la depresión y la ansiedad, sino que también ha hecho que sea aún más difícil acceder al tratamiento. Si bien hablar con una máquina puede no ser un tratamiento ideal, podría resultar muy útil como solución provisional o para aquellos que se ven menos afectados. También podría ayudar a desestigmatizar las enfermedades mentales y el tratamiento, un componente vital para mejorar los resultados de salud mental a nivel mundial.